Monterrey, N.L.-
El desarrollo industrial de las ciudades trae consigo un beneficio económico, pero al mismo tiempo cobra factura en la naturaleza, pues los ríos son los más afectados con la contaminación y la basura que llevan en sus causes.
Gerardo Monsiváis, inaugura hoy su exposición “Érase una vez un maldito paraíso” en la que presenta una serie de imágenes que hablan de este deterioro que han sufrido los ríos de diferentes estados de la República.
El artista plástico y también músico, ofrece un testimonio a través de sus pinturas, pero también transforma estos escenarios sórdidos “per se” en unas postales sublimes, pues considera que dentro de la desolación puede haber belleza.
“Creo que la belleza en como uno transforma la imagen, la belleza está en el trabajo mismo; está en el trazo, está en el color.
“Dos personas quizá no van a ver lo mismo en cierto escenario, pero quien sea capaz de reconstruir esa imagen de una manera bella, a veces es difícil pero se puede lograr”, consideró Monsiváis.
Añadió que aunque no hay una conexión directa de su trabajo como pintor y como músico, pero si existe una relación con la estética que se dan en las dos diferentes disciplinas.
“No tiene relación, no hay aquí un sonido específico, y en la música no hay estas imágenes necesariamente, pero cómo es la belleza; bueno, la belleza es lo que se construye a través de los elementos estéticos, los elementos artísticos.
“Es decir, si yo fuera un pintor hiperrealista, y fuera un pintor muy frío otra cosa sería; pero si, yo trato de imprimir esta cosa intrincada, psicológica en todos estos detallitos que están escondidos a veces por ahí”, argumentó el artista.
“Érase una vez un maldito paraíso” es una exposición organizada por el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León con el apoyo de la Secretaria de Cultura Federal.
La inauguración de la exposición es hoy miércoles a las 19:30 horas en la Pinacoteca de Nuevo León.