CD. VICTORIA, TAM.- El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio (Fecanaco), Julio Almanza Armas, llamó a la federación a reconocer la crisis que enfrenta México.
En ese sentido sostuvo que México enfrenta crisis en los precios del petróleo, una inestabilidad social y de gobernabilidad así como la baja cotización del peso frente al dólar lo que en conjunto no dan un panorama alentador para el año en curso.
Por este motivo advirtió a los residentes de la frontera a no hacerse ilusiones sobre la moneda americana ya que previó que esta no bajará su costo por lo menos en el primer trimestre del año.
Adelantó que los márgenes de compra de la moneda extranjera tendrá una variación entre los 14:50 y los 15:20 con un margen de variación extremadamente alto de 70 centavos.
Por ello, llamó a olvidarse durante este arranque de año del precio del dólar que dominó en el 2014 por el orden de entre los doce y trece pesos.
“Por el momento esos tiempos se acabaron y hay que enfrentar un nueva realidad tal y como lo debería hacer el gobierno federal y la SHCP al reconocer que tienen una crisis financiera que deben atender con urgencia y con mayor eficacia”, expresó.
Almanza Armas consideró que al alcanzar los máximos históricos, el ‘súper dólar’ se ha convertido en un artículo de lujo para los habitantes de la zona fronteriza.
“Además percibimos que las medidas de subasta de dólares anunciadas por el Banco de México para frenar y estabilizar el alza de esta moneda consistentes en subastar 200 millones de dólares diarios en caso de que la moneda estadunidense se aprecie 1.55 por ciento (22 centavos), respecto al tipo de cambio del día anterior, no están funcionando”.
Ante esta situación consideró necesario se activen mecanismo más agresivos para fortalecer la moneda mexicana ya que los actuales esfuerzos en la práctica están resultando poco eficientes afectando especialmente a la zona fronteriza del país.
En ese sentido expuso que durante los últimos días el alza a la moneda americana ha disminuido la productividad del sector comercial hasta en un 30 por ciento.
“Quienes más han sufrido esta situación han sido las empresas que se dedican a la importación de productos principalmente originarios de Estados Unidos”, puntualizó.