Reynosa, Tam.-
Seguro de que tendría más posibilidades de crecer profesionalmente, Roberto Ruiz Beatriz llegó desde su natal Poza Rica, Veracruz a Reynosa hace 12 años.
Dejó inconclusa su carrera de contador público y su trabajo como instructor de artes marciales en el Instituto Mexicano del Seguro Social. Trajo consigo sus ahorros, mismos que fueron insuficientes para montar su propia escuela en la localidad.
Empezó trabajando en una maquiladora, además de instructor de HEC-PAI KUNG-FU. Como maestro de dicha disciplina y cintra negra, accedía a talleres de alimentación impartidos por la Federación de Fisicoculturismo, por lo que dejó su empleo de operador para dedicarse de lleno a su pasión y al mismo tiempo le generaba mayores ingresos.
Estudió becado la carrera de nutrición en Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) y gracias al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y le fue otorgada otra más para continuar con una maestría en ciencia y tecnología de los alimentos, además de desempeñarse como auxiliar de maestro hasta que recibió su cédula y título de máster.
Al ser uno de los alumnos más disciplinados y destacados, recibió el cargo de catedrático y desde entonces forma parte del cuerpo docente de nutrición en la UAT. El ahora también conferencista logró tener su propio negocio: el K.O Total Fitness.
“Yo me enfoco al deporte, soy entrenador personal certificado por la Universidad del Deporte y la Federación de Fisicoconstructivismo. En mi gimnasio ofrecemos lo que es boxeo recreativo en un ambiente familiar”, comentó.
Actualmente combina la docencia con las artes marciales, brinda consultas privadas para crear nuevos hábitos en la alimentación de las personas.
Fue certificado por el Instituto de Nutrición Aplicado al Deporte (INAD) en Guadalajara, Jalisco, y es candidato a una certificación internacional de Kineantropometría ISAK nivel 1, una especialidad que mide la estructura corporal de una persona.
PASIÓN POR LAS ARTES MARCIALES
Las películas de Artes Marciales que veía de niño inspiraron a Ruiz Beatriz por dicha disciplina, pero fue hasta los 17 años cuando lo practicó como estudiante.
Y es que siendo un adolescente, su padre dejó el hogar; por lo que él y sus hermanos menores se quedaron al cuidado de su mamá. Desde entonces trabajó y estudió simultáneamente.
Al llegar a la mayoría de edad y tras tres años que practicó HEC-PAI KUNG-FU, logró obtener la cinta negra; lo que lo motivó en la importancia del ejercicio y lo benéfico en la prevención de enfermedades.
El deportista dijo que se requiere una
nutrición diferente a la de una persona común por la actividad física constante.
Con el tiempo aprendió otras técnicas como jiu-jitsu, jet une do, modern arnés, FCS, muay thai, savate, grappling y eskrima filpino.
PREVENCIÓN Y CONCIENTIZACIÓN
Las consecuencias de la obesidad en la salud de las personas, impulsó al docente a hacer conciencia en los niños y se dio a la tarea de diseñar un plan a corto plazo para disminuir las cifras de obesidad en menores.
Actualmente ofrece becas del 100 por ciento en entrenamiento y asesoría nutricional durante dos meses a un grupo de niños con sobrepeso.
“La idea es generar un vínculo donde mamá o papá compartan esta experiencia de ejercicio y alimentación”, detalló.
A principios del año próximo lanzará en sus redes sociales una convocatoria para formar parte de este nuevo plan de vida sana. El grupo se limitará a 15 niños y los interesados tendrán un precio especial para mejorar su salud.
Con información y fotos de: Viridiana Leal