REYNOSA, TAM.-
Luego del cambio de políticas en las aduanas mexicanas, los carriles de importación del puente internacional Reynosa-Hidalgo aparecen abandonados.
Aunque se aprecian las señales de flecha verde que indican que los automóviles, camionetas y camiones pueden pasar, hay una barrera que impide su paso.
La hierba ya empezó a crecer por el pavimento, debido a la acumulación de tierra, por lo que el área luce descuidada.
La internación de autobuses se realiza ahora por el primer carril de la derecha, donde son revisados, cuando llevan pasajeros que realizan sus compras “en el otro lado”.
En los otros carriles los semáforos siguen operando, por lo que si les toca rojo deberán detenerse para ser inspeccionados por agentes aduanales, quienes prohíben el paso de armas.
La franquicia actual para residentes es de 150 dólares y 300 para foráneos que cruzan en sus autos particulares.