Monterrey, N.L.-
Aunque el Ayuntamiento de la capital de Nuevo León asegura que “va en serio” el ordenamiento del Barrio Antiguo buscando con ello mejorar la movilidad, la realidad es que sus acciones se concentran únicamente en multar vehículos estacionados en lugar prohibido.
Lo anterior se demuestra al observar el desorden que existe en las calles de este emblemático sector del centro de la ciudad, donde los comerciantes y residentes invaden banquetas, construyen sobre ellas e, incluso, las usan para almacenar escombro y material de construcción.
Un recorrido por la calle Abasolo, solo una de las que conforma este sector, reveló que en un espacio no mayor a los 100 metros existe irregularidades que durante años han sido toleradas por las autoridades.
Por ejemplo un negocio de comida vegetariana construyó un templete sobre la carpeta asfáltica donde colocó mesas y sillas sin que ninguna autoridad los moleste.
Metros más adelante, una jardinera que fue edificada hace ya varios años invade el arroyo vial.
El exceso es la grava que alguien abandonó en la esquina de Abasolo con Doctor Coss, misma que impide el paso de los peatones.
Desde hace días las autoridades han reforzado la operación grúa y las multas contra los vehículos estacionados en lugar prohibido, lo que representa un ingreso a las arcas municipales, pero contra estas invasiones a la banqueta nunca se ha hecho nada.