Durango, Dgo.-
Una segunda víctima decidió denunciar al hermano Alejandro “N”, el lasallista que presuntamente cometió abusos sexuales en contra de al menos seis mujeres cuando era director del Voluntariado en El Salto, Durango.
Se trata de Ana Lucía Sandoval, uno de los seis testimonios que EL UNIVERSAL publicó en exclusiva el pasado 3 de diciembre. Ana se sumó a la denuncia penal que interpuso Sofía Vázquez el 8 de octubre en la Vice Fiscalía de Durango.
Este lunes, Ana acudió a las instalaciones de la Fiscalía estatal, en la capital, donde interpuso la denuncia. Luego de varias horas de narraciones y pruebas, se abrió una segunda carpeta de investigación, la cual se suma a la carpeta 6746/18 que interpuso Sofía.
Ana fue compañera de Sofía en la generación 22 del voluntariado en El Salto (2016-2017). Ella es una lasallista de Monterrey y había estudiado la preparatoria en el Instituto Regiomontano Chepevera.
Ana Lucía contó que decidió sumarse a la denuncia porque cuando inició su proceso de aceptación, primero lo hizo para apoyar a Sofía pero después, dijo, se dio cuenta que ella también debía exigir justicia para su parte.
“También fui afectada. Y también lo hago para que si más niñas se sienten o fueron víctimas se animen a denunciar”, declaró la joven.
Ana sufrió presuntas manipulaciones y abusos por parte del hermano Alejandro. A ella, como a otras voluntarias, le aseguró tenía problemas de autoestima, de inseguridades y se ofreció a ayudarla.
“Vamos a tener que empezar a arreglarlo de una forma muy extrema, te tienes que desnudar; vas a tener que desprenderte de todas las cosas”, advirtió. Ana nunca se imaginó que literalmente tendría que desnudarse.
Luego de una primera “terapia”, el lasallista le insistió a Ana para que hubiera una segunda, pero ella se negó.