México, D.F. / Abril 4.-
Para el cantautor Siddartha, no solamente basta aislarse del mundo y así contactar a las musas, se necesita que en el rock el músico salga del encasillamiento de los tres instrumentos (bajo, batería y guitarra eléctrica) y así dejar salir el poder creativo con sonidos que puede provocar hasta una simple taza de café, es, dice, volver a la esencia de los sonidos, lo orgánico.
Esta fue la concepción de su nuevo disco titulado “Náufrago”, en el cual decidió alejarse de la ciudad y todo lo que conlleva (la tecnología), para sumergirse en sus momentos de autoexploración.
“Tras salir de Zoé (era baterista) y sumergirme en el mundo del solista, en realidad nunca tuve tiempo para mí; me absorbió crear una banda, lanzar mi primer disco, las giras, no tuve espacio y este disco tenía el objetivo de satisfacer mi necesidad creativa”.
El cantautor confiesa que una de las melodías incluídas en su disco, y que le provocó emociones encontradas fue “La historia”, pues escribirla fue como vivir sus primeros momentos lejos “del mundo” donde no sabía qué hacer en el lugar solitario donde se hallaba.
“Fue difícil quedarte sólo con tus instrumentos, una guitarra, un teclado, pero te das cuenta que hasta con una taza para café puedes crear música. A veces los roqueros nos encasillamos al sonidos de los ‘tres instrumentos’, pero a mí me aventura hacer siempre cosas distintas”.
Y dentro de esas cosas inusuales, refiere, tiene previsto hacer un dúo con el actual guitarrista de Zoé, tal vez grabar unos cinco temas en conjunto, por el simple placer de hacerlo, mas no comercializarlo.
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