Hidalgo, Texas.-
Con puertas giratorias los peatones están ingresando ahora a la aduana internacional Reynosa-Hidalgo.
Los torniquetes sólo permiten la entrada de una persona a la vez, para los visitantes, además de otra por el tradicional Sentri.
Al parecer, por la temporada decembrina cercana, se acabaron los “privilegios” para los ciudadanos norteamericanos que antes pasaban de manera directa, sin la necesidad de hacer largas filas como los mexicanos y extranjeros.
“Lo que pasa es que habían muchas quejas de la gente, porque los ‘gringos’ no hacían la cola como todos”, opinó una trabajadora de un restaurante local de la frontera.
Esta medida afectará a cientos de estudiantes y trabajadores que utilizan una bicicleta para llegar a tiempo a sus destinos.
Aquí en la frontera también cruzan miles de personas que trabajan legalmente en el estado de Texas.
Agentes estadounidense están realizando revisiones al azar a los visitantes, para verificar su estadía en la frontera.
“Le toca revisión, vaya con los agentes”, le dijeron a un visitante, para luego hacer espera en el sitio, donde meses antes cientos de cubanos y centroamericanos solicitaban asilo en los Estados Unidos.
-¿A qué viene a los Estados Unidos?, le dijeron.
-Es domingo, voy a la pulga de compras.
-¿Y qué lleva en ese maletín?
– Soy maestro.
-Pásele señor.