Enero 12
A los 24 años se convirtió en figura durante la pasada entrega de los premios Grammy, pero el talento musical de Amy Winehouse se vio opacado por sus escándalos y problemas de salud relacionados con el consumo de drogas.
Con su esposo en prisión y sumida en sus adicciones, durante 2008 se habló más de la vida privada de Winehouse que de su trabajo en la escena musical.
Un ingreso al hospital a finales de octubre parecía ser el “fondo” en la historia de excesos de la joven, ahora ya con 25 años cumplidos.
Durante estos meses, la cantante tampoco se ha caracterizado por su mesura a la hora de hablar, pues además de asegurar que el diablo es culpable de sus adicciones dejó en malos términos a su esposo, Blake Fielder-Civil, al asegurar que es una basura en la cama.
Y es que como la propia Amy declaró, ha encontrado un nuevo compañero que le ha ayudado a superar su consumo de sustancias prohibidas, pues su única droga es el amor.
Además, Winehouse dijo que se siente bien e incluso ya ha pensando en nuevas canciones y discos para retomar su carrera musical. Incluso, la cantante británica asegura que físicamente está mejor que nunca, algo que han corroborado las imágenes en traje de baño en las que ha sido captada en el Caribe.
¿Escape del infierno?
Pero pese a sus declaraciones, la cantante no ha dejado de causar revuelo aún durante sus vacaciones en la isla de Santa Lucía. Primero fue vista refrescándose en el mar sin la parte superior de su traje de baño, después cantó en topless en el balcón de un hotel.
Luego, Winehouse fue captada con una botella de cerveza en la mano, algo impensable si se trata de alejarse de las adicciones.
Además, durante sus días de descanso un ex amante reveló que la intérprete de Rehab es adicta al sexo.
Finalmente, la británica fue vista paseando en actitud muy cariñosa con un sujeto que no es su marido: Josh Bowman, su nuevo amor y a quien la cantante busca por su manera ordenada de vivir y a quien incluso le ofreció una serenata improvisada.
Winehouse declaró que hace tiempo al ver unas fotos de ella tomadas por los paparazzi la llevó a pensar que tendría que “arreglarse” o estaría muerta pronto.
La joven de 25 años dice que escapó del infierno que significa vivir en Gran Bretaña, donde todo el tiempo pensaba en consumir drogas y por ahora, llena de amor y salud, no piensa regresar.
¿Podrá la cantante retomar su carrera?
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