Fotos: Andrea Jiménez
Monterrey, N.L.-
Los Rayados de Monterrey lograron retener el liderato contra su acérrimo rival, Tigres, a quien si le arrebataron el título de mejor ofensiva del torneo. Si es que los dos equipos llegan a la etapa final de la liguilla, el cuadro Rayado cerraría como local.
La pandilla cerró la temporada regular afianzando su liderato contra los Tigres, equipo al que vencieron con un autogol de Juninho provocado por Neri Cardozo y otro tanto de Avilés Hurtado, en la edición 113 del derbi regiomontano que se disputó en el BBVA Bancomer.
Los del cerro de la silla se mostraron superiores al cuadro nicolaíta durante la primera mitad y aunque los pupilos de Ricardo ‘El Tuca’ Ferretti insistieron en varias ocasiones, la zaga rayada logró contenerlos en casi todas las jugadas.
La noche se pintaba gris para los de la U de Nuevo León desde el minuto 5′, pues Israel Jiménez salió de la cancha por un dolor en una de las piernas.
A los 15 minutos de juego la pandilla se iba arriba con un tanto de Avilés Hurtado, sin embargo el abanderado señaló fuera de juego y el árbitro central anuló el gol, ahogando el grito de la afición que se mostró eufórica en todo momento.
Así terminaron los primeros 45 minutos y los equipos se fueron al descanso con el marcador en ceros.
La noche ya había conspirado a favor de la pandilla, quienes a los pocos segundos de la segunda parte provocaron un autogol y se fueron arriba en el marcador.
En una jugada dentro del área, Neri Cardozo ganó la pelota a la defensiva auriazul y tiró a la portería, sin embargo Juninho intentó desviar el disparo internándolo en su propia red.
Cinco minutos más tarde el colombiano Avilés Hurtado remató de cabeza en un tiro de esquina y clavó el esférico en el ángulo inferior derecho sin que Nahuel Guzmán pudiera hacer algo para detenerlo.
Aunque los universitarios intentaron anotar en reiteradas ocasiones, no lograron definir las jugadas y mucho menos arrebatarle el liderato a la pandilla.
Una de las acciones polémicas del encuentro fue cuando Nahuel Guzmán retiró el pasto dañado en su área chica y lo aventó a fuera del campo, en ese instante el juez central le llamó la atención y ordenó que los utileros volvieran a colocar los dos cuadros de césped en su lugar.
Con este triunfo los Rayados terminan como super líderes con 37 puntos y logran su mejor actuación en torneos cortos en recibir menos goles en la temporada regular con 12 tantos, el récord era de 15 goles recibidos en el Bicentenario 2010 y apertura 2012.