León, Gto.-
El América salió del estadio León en silencio y con una tremenda frustración.
Miguel Herrera, a mitad de la primera pregunta en la rueda de prensa, abandonó la sala: “Buenas noches, no hicimos un buen partido”, dijo y se marchó enojado, rojo de coraje.
Ya con el humor más estable tras la derrota, el “Piojo” justificó su berrinche con una disculpa. “Estaba muy caliente para decir pen…”, apuntó, mientras abordaba el autobús y los aficionados le lanzaban todo tipo de insultos que le recordaban a su madre, aunque otros pidieron su renuncia y al mismo tiempo le gritaban el apellido “¡Martinolli, Martinolli!”.
Así se marchó el “Piojo” y su cabizbajo grupo, sin dar la cara a su afición.