Ciudad de México.- Dirk Nowitzki, el alemán de 2.13 metros, levanta los brazos y agradece a los mexicanos presentes. El teutón y los Mavericks de Dallas triunfan sobre los Suns de Phoenix 113-108, en un partido muy peleado por ambos equipos.
El cotejo arrebata suspiros y gritos en la Arena Ciudad de México. Nowitzki, con 18 puntos, seis rebotes y una asistencia, es el motor que le hacia falta a la franquicia texana. Deron Williams (con 23) y Harrison Barnes (22) apoyan al germano sobre la duela decorada con colores nacionales.
Los 39 puntos del joven Devin Booker no son suficientes para que Phoenix consiga su primer triunfo de esta gira en tierra azteca.
Los equipos peor ubicados en la Conferencia Oeste de la NBA dejan sonrisas en los fanáticos del deporte ráfaga.
La gente divida en una Arena México que no se llenó, apoya a ambos equipos. En las jugadas grandes aplauden al germano y al puertorriqueño JJ Barea, por parte de los Mavericks; sin embargo, en los tiros libres abuchean y silban a quien cobra el tiro, el nombre no importa. La afición se divierte, el marcador los tiene sin cuidado.
Para el comienzo, el gran veterano y líder del equipo Tyson Chandler tiene a Phoenix arriba en el marcador. Su experiencia permite que la estrategia del entrenador Earl Watson funcione.