Gocen los 4 meses que les restan bandido alcachofa, rufianes rugidores y ratas del gabinete, manoteen de lo lindo lo que puedan, disfruten las canonjías y amasen lana, papeense en grande, como lo han hecho desde el primer día, hace 4 años y 8 meses. No pierdan el tiempo en trabajar, ustedes roben a lo bestia. Porque cada vez está más cerca la noche del 30 de septiembre, fecha en que le van a chispar a la fregada todos ustedes.
NUEVO MES, UNO MENOS
Se fue mayo, el mes de la madre y de darnos en la idem este hampón a todo el pueblo, se les fue una mensualidad más en su “Año De Hidalgo” a este y a sus truhancitos. Hoy empieza un mes, feliz 1 de junio, restan 122 días para que se acabe este maldito gobierno dañino y tracañan. Ya falta poco para el cambio, todos estos hampones de hoy, desaparecerán, con alforjas llenas, pero le pintarán a la fregada. Ya ni siquiera serán proveedores del burricipio, que es la otra manera de robarse el erario, además del hurto directo al capital, al indefenso presupuesto.
NOSOTROS TUVIMOS LA CULPA
Pero ellos están ahí, amasando fortuna, solamente por nuestra culpa, como ciudadanos tan pasivos que fuimos. Quiera Dios que hayamos aprendido la lección, pues pese a ser una ciudad como de 500 mil habitantes y que el 1 de julio del año 2018 tenía registrados 300 mil votantes en el padrón oficial, con solo 50 mil desgraciados votos ganó este pillastre de pacotilla. Sólo con la sexta parte del electorado y la décima porción del número de habitantes.
¿APRENDIMOS LA LECCIÓN?
¿De quién fue la culpa que este tipo nos robase tanto? ¡Exacto!, de Yogas y Tuercas, del elector que no votó. Solo la sexta parte de los votantes (y buena parte de los votos de este monkey con nuestro money fueron comprados) llevó a un tipo color gris rata al centro de nuestro tesoro, al corazón de la lana del pueblo, esa de más de 3 mil millones de pesos cada año.
SEÑOR DON HAMPÓN
Y con nuestra pasividad le condujimos nada menos que a convertirse en el bandido más rico de Nuevo Laredo. Sí, ese fue el resultado de la contienda del 1 de julio del 2018. Y digámoslo con todas sus letras. Fue gracias a un pueblo apático y desinteresado en política (los números son fríos). Así, hoy un verdadero papanatas, está podrido en billetes (mal habidos todos).
“TODOS SON LOS MISMOS”
El tipo está archirequetecontramultmillonario, gracias a una comunidad que dijo; “para qué voto”, “todos roban”, “siempre es lo mismo”, “al que pongan nos va a fregar”. Aquí viene la pregunta obligada, apropiada al tema de que este domingo 6 de junio, nuevamente habrá elecciones en el pueblo para escoger a quien suplirá a este malhechor; ¿Ya aprendimos la cruel lección o todavía no?
“TODOS SON LOS MISMOS”
“Están cortados con la misma tijera”, “Solo cambian los nombres”, “Es la misma gata”, “Para que votar si ellos deciden a quien ponen”, “Todos son unos rateros”, “Están amañadas las elecciones”, “Ponen al que ellos quieren”, “El más pelón se hace trenzas”, “El más chimuelo masca rieles”. Preguntamos de nuevo; ¿Ya habremos padecido lo suficiente para comprobar que no podemos dejar de votar, que todos tenemos que salir a sufragar?
VAMOS A VOTAR TODOS
Todos vamos a votar, que no se quede nadie en casa, que ningún elector se reserve el derecho a elegir a sus gobernantes y a sus representantes en las cámaras legislativas. A Nuevo Laredo nos ha ido muy mal con alcaldes y diputados. Nos va pésimo cada tres años, debido a que no acudimos a las urnas, a la gran mayoría no le importa sufragar, le da igual quien ocupe esos cargos. Los porcentajes de abstencionismo nos restregan en los rostros esa cruda verdad.
ALGUNOS EJEMPLOS
Benjamín Galván Gómez ganó en el 2010 a Salvador Rosas Quintanilla ¡de buenas! (y como quiera así nos fue de mal), pero los medios nacionales citaron este resultado para ejemplificar el marcado abstencionismo que de siempre ha presentado Tamaulipas, dijeron que como es posible que con apenas el 30 por ciento de posibles votantes, se decida el gobierno de una ciudad tan importante.
LA MEJOR NO ANDUVO BIEN
Y Carlos Enrique Cantú Rosas Villarreal ganó la siguiente alcaldía en el año 2013, pero sólo sufragó el 47 por ciento de listado que podía hacerlo. Ni siquiera la mitad. Y conste que esa fue la más copiosa asistencia de los tiempos modernos. Sí que estamos para llorar en Nuevo Laredo. ¿O no? ¿Y porqué nos va como nos va? Pues ya lo saben.
3 DE CADA 10, VOTAN
En el año 2009 para la diputación federal Cristabell Zamora, ganó, pero en Nuevo Laredo no votaron ni 100 mil de los 288 mil electores registrados en esta ciudad: Y de esos, ni la mitad votó por ella. Y ya contando “la frontera chica (“La Gran Frontera”, le llaman solo cada que hay elecciones), es decir, todo el padrón del Distrito I de Tamaulipas, que en ese entonces fue de 334 mil electores, desde Nuevo Laredo a Camargo, apenas votaron 113 mil 458 personas, o sea, sólo sufragó 1 de cada 3 cristianos.