ÓSCAR GENARO HERNÁNDEZ ZUÑIGA es un político de Madero que tiene años haciendo talacha, aún y cuando tiene muchos recursos económicos debemos reconocer que es un personaje sencillo, que gusta hacer amigos y los trabajos más humildes dentro del PRI.
En ese sentido lo hemos visto pegando calcomanías y entregando propaganda por todas las vías, no se siente menos, le encanta hacer política.
Pero con todo y sus antecedentes de trabajo, nunca le han dado la oportunidad de ser candidato por Madero. Es más prácticamente siempre es borrado de las listas.
Sabe de antemano que para alcanzar una candidatura debe cumplir con un requisito primordial como es contar con el visto bueno de los petroleros, pero simplemente nunca se ha llevado bien con los mandamases del sindicato.
Por eso queda vestido y alborotado en cada elección, siempre esperando la famosa llamada, aunque cuando se trata de aportar recursos y trabajo partidista siempre es atendido con prontitud.
Por eso nos gustó escuchar la entrevista que le hizo la periodista MARIBEL VILLARREAL para Mundo Tamaulipas y en donde el maderense establece claramente su militancia y lealtad aún y cuando considera que es su última oportunidad de cristalizar un sueño que cada elección es transformada en una pesadilla de desesperación y frustración.
Lamenta como algunos de sus compañeros hayan abandonado al PRI en los meses recientes, pero indica que no se les extrañará, pues sus lugares ya fueron ocupados por otros que hacían fila por ese lugar.
En la entrevista ÓSCAR GENARO señala que no se siente relegado por el hecho de no alcanzar un puesto de elección popular, pues siente que la política es una oportunidad de servir, por lo que acepta gustoso los encargos de su partido de trabajar en unidad, como coordinador de campaña, de finanzas y cualquier otra actividad.
“No me decepciona que en 20 años de carrera no me hayan dado, me gusta ser amigo de la política”.
Dijo que el PRI perdió porque los ciudadanos estaban cansados de que no se avanzara y creciera la pobreza y la inseguridad, por lo que llego el momento de cambiar para recuperar los espacios y entender que los votantes ya no seleccionan partidos, si no que buscan las cualidades de las personas por las que van a sufragar.
ÓSCAR GENARO está muy lejos de ser un político pobre, por el contrario es un hombre con empresas consolidadas, pero que en el PRI sólo lo han visto como un obrero de lujo, sin darle la oportunidad de crecer, pero con todo y eso no abandona al PRI.
Esta misma cuestión no aplica para los que se fueron, en Madero por ejemplo la renuncia de ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO se registra después de que el PRI le dio las mejores oportunidades que pudiera recibir un tipo gris. FELIPE GARZA NARVÁEZ es punto y aparte obtuvo todo lo que pidió, por lo que no hay justificante que valga para marchar.
En el PRI se van muchos priístas porque no reciben oportunidades, ni premios, ni nada. Al menos ÓSCAR GENARO tiene dinero y esperanza, pero otros militantes carecen de todo y más cuando ven a los viejos dinosaurios sentados en primera fila disputando la oportunidad de quedarse con los mejores huesos que se repartirán en el 2018.
Regresarán los rencores, los sinsabores y las decepciones, parece que en el tricolor no entienden, dicen que todo mundo tiene una línea y en el PRI cuerudo se dibuja desde las colindancias del cerro de la silla.
Pobre políticos que creen que todavía pueden jugarle el dedo en la boca de los priístas.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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