Los morenistas de Tamaulipas deberán tener cautela con sus reproches porque la Cuarta Transformación podrían convertirla en la Primera “Trastornación”, pues aún comprendiendo la pretensión de cerrar las puertas a los priístas y panistas que desean colaborar con “su” movimiento político para impedir contaminación, es inocultable que ese celo es derivado de la eventual posibilidad de que les arrebaten el lugar preferente en el reparto del pastel.
Ese desequilibrio los llevará a un estrepitoso fracaso electoral el próximo 2 de junio, ya que tomar el Palacio Legislativo implica el concurso de diversas fuerzas políticas, más no parece lo vean así con todo y que el PAN es el que gobierna en 31 de los 43 municipios así como en las instancias estatales, las que obvio van a operar en pro de los candidatos del precitado partido.
El MORENA en Tamaulipas con todo y ser una corriente política emergente y creciente, en mí opinión no está para desdeñar refuerzos, sino lo hicieron los cruzados cuando emprendieron la guerra santa menos cuando se trata de batallas políticas.
Como que no están atendiendo la prédica del perdón y olvido, siempre y cuando se porten bien a partir de ahora, y los priístas que acudieron a la reunión morenista del pasado sábado se infiere que fueron con la intención de coadyuvar en la tarea de derrotar al enemigo común, al ver que en el partido en el que militaban no tienen la intención de vencer al que los expulsó de poder.
Que tengan un buen inicio de semana todos.