Bueno, ya estuvo bueno, el moderno supervisor de obras burricipales (manque ni es ingeniero o arquitonto) ya trabajó toda una semanota inglesa, es decir, que ya camelló de lunes a viernes, en ir a echarle un ojo a los trabajillos que se están aventando por algunos puntos del rancho. Entonces ya es hora de que de nuevo se separe del cargo y se vaya a vacacionar otros tres meses más.
CUIDAR LA GREÑA
El pueblo de Nuevo Laredo le ruega encarecidamente a este mico, a que descanse otro tiempito. Y le recuerda que no se debe ajetrear mucho, para que no le sude la cholla y así pegue muy bien el mastique que se puso, para que las greñas no se le vayan a volver a zafar. Y es que al pueblo nos está costando tanto esa siembra azabache en la maceta, que ya no la queremos estar pagando a cada rato.
AÑO SABÁTICO
Lo más barato para Nuevo Laredo, es pagarle su sueldo íntegro de un año, con vacaciones, bono navideño, fondo de ahorro, una ración de horas extras, guardadito, cochinito, boletos de avión y hotel, a cinco puertos paradisiacos, dentro o fuera del país. Todo eso y un poco más, nos saldría más barato al pueblo, que tenerlo dizque chambeando, porque eso sería mantenerlo pegado a la caja de las galletas. Y todos ya sabemos muy bien, lo que eso significa para las manos más veloces del viejo oeste.
¿DÓNDE CECILITA, DÓNDE?
Hablando de gaviotecas, acaba de decir Cecy Del Alto, quien cobra y finge como Secre Estatal de Sobras Públicas, que se derramarán 5 mil melones de varos federales y estatales (o sea, pura lanita federal, pero de la que el goberladrón se está adornando como dinero puesto por Tamaulipas), en este año 2018, para construir 260 obras que ya se están efectuando, más otro número (no especificado) de proyectos por venir. O sea, puras piñas ¿O ustedes ven algo del estado, haciéndose por aquí? A lo mejor nosotros estamos ciegos.
SON MENUDENCIAS
Y 5 mil melones de bolas para todo un estado compuesto de 43 pueblos, sí que son migajas, una lanita cualquiera. Figúrense que tan solo en Nuevo Laredo, se supone que tal suma ya se la escabechó Enrique…cido Rovas en apenas 22 meses. ¡Sí, despareció los erarios de 2017 y 2018! ¿O usted estimado lector y resistente residente de Nuevo Laredo, ve 5 mil millones de pesos aterrizados en suelo de su amado pueblo, durante estos dos últimos años, de este gobierno panadero de “El Peterete”?
7 MIL FAMILIAS POBREZA EXTREMA
En Nuevo Laredo, se tiene ubicado a 7 mil familias que viven en grado de pobreza extrema (según ese ángel en la tierra llamado Elda Elizondo, quien entusiasta e incansablemente, encabeza a Cáritas De Nuevo Laredo). Entonces, decir 7 mil familias multiplicadas por cuatro miembros en promedio, estamos hablando de 28 mil coterráneos, que no saben si van a comer hoy. Si algo de los 5 mil millones que se ha birlado o trincado este gobierno ranchero, hubiera ido a parar a un programa social de ayuda, no tendríamos a 28 mil personas que no saben si van a llevarse un mendrugo de pan a la boca, en las siguientes horas, este día, ahorita mismo en la mañana.
SON JALADAS
Lo que tenemos aquí, es un gobierno bastante rico y un pueblo sumamente pobre. No nos digan que ven 5 mil millones de pesos en Nuevo Laredo, aterrizados entre el 1 de octubre de 2016, a este 10 de agosto de 2018. Se trata de uno de los robos más cínicos y groseros que ha padecido nuestra raza. Ni por asomo, puede decirse que se ha invertido ese dinero para beneficio de la gente nuestra. Ni siquiera creemos que la mitad de esa suma se haya dedicado a tal fin.
PUEBLO DADO AL CUÁS
Porque con cinco mil millones de pesos de presupuesto (juntando la lana de 2017 y la de 2018), no tendríamos palmeras borrachas por el sol, ni arbustos rostizados por falta de riego. Ni tampoco 72 tiraderos clandestinos de basura. Ni media ciudad apagada por focos fundidos, ni estaríamos llenos de perros callejeros, ni olería a excusado de pozo todo el pueblo. Con cinco mil millones de pesos, no habría más de 10 mil millones de baches, ni socavones, ni zanjas, ni nada por el estilo.
SERÍAMOS OTROS
Con el presupuesto de egresos de estos dos últimos años, Nuevo Laredo estaría bellísimo, sus parques y plazas no lucirían abandonadas y secas, terregosas y sucias. Nuestra ciudad tal vez no tendría progreso, pero tampoco baches, las calles serían confiables para transitar y las banquetas también. Esto es solo una parte de todo lo que está mal y de porqué no vemos 5 mil millones de pesos invertidos en el pueblo. La lista de las deficiencias y los detalles negativos en Nuevo Laredo, son incontables. Así que no nos digan que este bato ha hecho tanto en tan corto tiempo.