Reynosa, Tamps. / Marzo 6.-
Por instrucciones de las oficinas centrales de Cruz Roja Mexicana, los paramédicos de la institución en Reynosa operan con un “protocolo de guerra”, que incluso ya fue utilizado en el pasado enfrentamiento del 17 de febrero.
Dinorah Guerra Garza, presidenta de la Institución en ésta ciudad, informó que se tomó la medida debido al recrudecimiento de la violencia en el país.
Aseguró que se trata de evitar que los paramédicos sean objeto de maltrato o amenazas por parte de fuerzas militares o de grupos delincuentes.
Guerra Garza explicó que el personal de emergencia fue capacitado con un curso llamado Acceso Seguro donde “se marcan especificaciones, como portar la camisola con el logo de la benemérita institución, además de prescindir de los cinturones o fajillas, en donde puedan portarse radios, teléfonos celulares o instrumentos que puedan ser confundidos como armas en los momentos en que acudan a prestar auxilio en balaceras o actos similares”.
Explicó que las unidades de emergencia no retrasan su llegada al sitio de la contingencia pero sí se ubican estratégicamente donde las autoridades policíacas puedan tener fácil acceso a ellos para cualquier traslado o atención médica en el lugar.
Hizo mención que este protocolo se viene implementando en el país desde la liberación de Ingrid Betancourt (en Colombia), porque en este evento se dio “una situación de que para poder rescatar a la mujer se disfrazaron de paramédicos de Cruz Roja”, comentó.
Calificó de lamentable que ahora los guerrilleros y la delincuencia no confíen en los paramédicos de la institución, por lo que tengan que tomarse este tipo de medidas para evitar que ellos puedan resultar agraviados.
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