Monterrey, NL.-
Diversas interpretaciones de obras como resultado de profundas investigaciones se encuentran en Símbolos. Metamorfosis, Exposición Homenaje a Esther González, que se inaugura este miércoles 26 de abril en la Pinacoteca de Nuevo León.
Esta magna exposición reúne alrededor de 100 obras en las que la creadora realiza una reestructuración personal de símbolos antiguos y del cristianismo ortodoxo, que datan de los siglos XI al XVI.
En la muestra se incluyen dibujos, grabados y acrílicos sobre tela y en papel amate.
“Esta es la exposición más emblemática del año en la Pinacoteca de Nuevo León y es un muy significativo que sea un homenaje a la maestra Esther, una artista que al retomar el arte del pasado descubre nuevas formas que plasma en su obra para presentar algo muy distinto. Es una frescura y un deleite ver su obra”, resaltó Ricardo Marcos, presidente de Conarte.
“Es un privilegio que haya aceptado realizar esta exposición y el homenaje que le hacemos, en un proyecto importante que ha impulsado la Pinacoteca de Nuevo León para reconocer a los artistas trascendentales de nuestro Estado”.
La maestra Esther González agradeció el reconocimiento que se realiza a su trabajo.
“Uno trabaja en solitario con su pensamiento, tratando de resolver problemas, ya sea pintura o grabado, pero no piensa en lo que tiene que explicar… lo único que me da la libertad de ser yo es la pintura. Al trabajar cualquier tema, debo respetarlo y resolverlo a través de la pintura, es lo que conozco: crear armonía en un espacio con el color, la forma y las dimensiones. Eso es, con simples palabras, lo que soy”, expresó.
“Debo de decir, gracias en general a Monterrey, que me dio la oportunidad de crear y hacer tangibles mis sueños para seguir adelante y estar hoy ante todos ustedes. Gracias a toda su gente, sus instituciones y a los lugares donde tuvimos oportunidad de trabajar, estudiar y seguir. Es la vida así, muchas gracias”.
La exposición se inaugura este miércoles 26 de abril a las 19:30 horas con una charla con la participación de la artista expositora y la maestra Rocío Castelo, curadora de la muestra, organizada por el Conarte, a través de la Pinacoteca de Nuevo León, en coordinación con la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Símbolos. Metamorfosis realiza una exploración sobre símbolos religiosos y filosóficos. Las investigaciones realizadas a lo largo de su carrera han dado como resultado que la maestra rescate en sus piezas algunos vestigios del arte bizantino, clave en la construcción de la iconografía, creencias y tradiciones de las obras religiosas.
Al partir de sus estudios preliminares, Esther González es capaz de recrear obras sumamente conocidas para impregnarlas de un estilo único, convirtiéndolas en todo un descubrimiento a los ojos del espectador.
En Símbolos. Metamorfosis, el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León y la Universidad Autónoma de Nuevo León le rinden un merecido homenaje, que forma parte también de la celebración del 10 Aniversario de Colegio Civil. Centro Cultural Universitario, sede de la Pinacoteca de Nuevo León.
Esther González cuenta con una reconocida trayectoria a nivel internacional. Se ha destacado como una investigadora del lenguaje y los símbolos del arte, contribuyendo a la preservación de un importante bagaje cultural y religioso.
A lo largo de su trayectoria, la creadora egresada de la Escuela de Artes de la Universidad Autónoma de Nuevo León ha construido un lenguaje que se traduce en piezas artísticas con una gran fuerza expresiva.
Tiene en su haber exposiciones individuales y colectivas en países como México, Argentina, Estados Unidos, India, Suiza, Italia, Japón, Bulgaria, Bélgica, Cuba, Estados Unidos, Suiza, Chile y Polonia.
Además, la maestra Esther González cuenta con numerosos reconocimientos y premios. Entre estos se destacan: Premio de Grabado del Salón de la Plástica Mexicana (1971); segundo Premio de la exposición El árbol y el bosque en el grabado, del INBA (1978); el Premio de Pintura del Salón de la Plástica Mexicana (1985); Premio de Dibujo del Salón de la Plástica Mexicana (1988); Premio de Pintura Mazatlán (1991); y Premio de Pintura Arte de Monterrey (1991).
Es miembro honorario del Centro de Investigación de Cultura Ortodoxa San Miguel de Arcángel del Centro de Lectura Nacional Dobri Voynikov (Shumen, Bulgaria).