México, D.F. / Diciembre 20.-
Por más de dos minutos “Lo mataron, lo mataron” es la única frase que se entona en un corrido dedicado al narcotraficante Arturo Beltrán Leyva; otro advierte al presidente Felipe Calderón que “operativos como éste no te hacen un gran favor” y uno más hasta alude al sepelio en Durango. En total, ocho videos de narcocorridos fueron producidos horas después de la muerte de El Jefe de Jefes y pueden ser consultados en YouTube.
Imágenes del cadáver del líder del cártel de los Beltrán Leyva, su fotografía que acompañaba los afiches oficiales en los que se anunciaba como uno de los narcotraficantes más buscados, escenas de enfrentamientos y muertos, así como fotos de su enemigo Joaquín El Chapo Guzmán ilustran los videos que hablan sobre la caída del capo durante la incursión de los marinos en Cuernavaca, Morelos, el miércoles pasado.
Desde el 17 de diciembre los productores subieron a Internet un corrido que relata la operación de las fuerzas navales: “Secretaría de Marina y Armada de México, algunos cuantos soplones también, el Ejército como con 10 pelotones, creo que hasta con un cañón, también francotiradores, matarían a un gran señor, murió Arturo Beltrán Leyva así nomás de repente, conocido como El Barbas por algunos de su gente, pero para todo el mundo él era El Jefe de Jefes”.
Mensaje a Calderón
La letra, interpretada por un grupo anónimo, en otro de los estribillos menciona al Presidente. “ Yo quisiera comentarle a Felipe Calderón, operativos como éste no te hacen un gran favor, sólo demuestran con creces que tú no fuiste el mejor”.
Otro de los videos dice “Póngale atención a este corrido porque es una historia real, verídica, éste si es un corrido méndigos, verdad de Dios que sí”, durante los 2:34 minutos de duración, con imágenes del operativo en Cuernavaca y fondo musical norteño, sólo es acompañado como letra con la frase “lo mataron, lo mataron”.
La inspiración musical que desató esta muerte, también incluyó como tema las exequias, el cual señala el supuesto lugar al que llevaron el cuerpo.
“Hay que seguir adelante, cuando se pierde una vida. Es difícil aceptarlo, Dios sabe la hora y el día. El destino está marcado la familia se decía, fue la familia Beltrán los que ahí estaban reunidos, velaban a Arturo el mayor, que de este mundo se ha ido”.
Uno de los estribillos señala: “Ya hay gente en el velorio, sus familiares y amigos, ese pueblo de Coloma, de Tamazula, Durango. Le decían el correoso, por la gente afamado. Ya nunca lo miraremos, por las calles él paseando. Héctor y Raúl Beltrán, ausentes en el sepelio”.
Otro corrido que escribieron en memoria del capo alude al poder que alcanzó el narcotraficante de origen sinaloense, y como si él fuera el cantante, en primera persona se escucha: “estaba yo muy chamaco cuando inicié mi carrera agarrándome a balazos con los guachos en la sierra, querían quemar mis trabajos pero toparon con piedra, unos colas de borrego y unos kilos de la negra. Hoy traigo dos celulares de alcance internacional, uno quiero pa’ mis barbies y otro para trabajar, un beeper para mis claves y a mi jet particular subiré a la que me cuadre, y en el avión disfrutar”.
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