México, D.F. / Agosto 23.-
Malas decisiones, desafortunados comentarios hicieron que Lupillo Rivera tuviera que autoexiliarse por dos años del mundo de la música; en total, han sido seis para que “El Toro del Corrido” reviviera y, ahora, con el cariño que de nueva cuenta recobra de su público, ellos le perdonan todo y le corean su nombre.
La semana pasada el intérprete se presentó en un famoso rodeo, en el estado de México, donde causó expectativa con su llegada y eso se reflejó en la taquilla del lugar, ya que al inmueble asistieron alrededor de seis mil personas.
Fue alrededor de la una de la madrugada del sábado cuando cientos de almas ya esperaban al intérprete, quien hizo gala de su forma de ser dicharachera, cosa que encantó al público, quienes al final, como muy pocas veces lo hacen en un rodeo, corearon el nombre del cantante de manera continua.
“Despreciado”, “Prefiero la calle”, “Qué tal si te compro”, “Borracho yo he nacido” y “Tú y las nubes”, son sólo algunas melodías que se escucharon en la voz del intérprete y que pusieron eufóricos a sus fans.
Aunque todavía no cobra la fuerza, esa que le llevó a ser en su momento el exponente más importante de la música norteña, Lupillo sabe que los avances en su carrera son muy grandes, sobre todo si literalmente empieza desde cero.
Por ello, cuando se le pregunta su sentir por estos mágicos momentos, con un lugar hasta el tope y la gente coreando su nombre, Lupillo expresa: “Siento una forma de revivir muy bonita. Estamos muy contentos con el apoyo del público; fue muy bonito ver cómo el público esperaba para verme, y todavía sigue en espera de poder tomarse la foto del recuerdo.
“Sólo espero seguir echándole ganas al trabajo , que el respetable nos apoye; ellos son quienes me contagian de su buena energía, son mi apoyo, finalizó.
Altruismo antes de presentación
Horas antes de su presentación en un importante rodeo de Cuautitlán, estado de México, el cantante sorpresivamente arribó a la sede de la Asociación Reforma Renueva A.C., ubicada en la colonia Ejidos de San Agustín, en Nezahualcóyotl, llevando emoción y alegría a un grupo de infantes que padecen una enfermedad llamada retinoblastoma, que es un tipo de cáncer que ataca los ojos.
Ante la sorpresa de los pequeños y de sus padres, Lupillo hizo su aparación y de inmediato interpretó un par de temas, acompañado por un mariachi que se encontraba en el lugar, provocando el aplauso y las porras de todos los presentes.
Víctor Hugo Hernández Moctezuma, coordinador de Apoyos y Beneficios de la asociación mencionada, agradeció el hecho de que el cantante abriera un espacio en su agenda de trabajo; por su parte, Rivera, a su vez se emocionó por las muestras de cariño, asegurando que siempre hará un espacio en sus actividades, para llevar un momento de alegría a los pequeños.
Además de amenizar el lugar, el vocalista hizo un donativo a la asociación, mismo que servirá para operar a la niña Jennifer Camacho de 10 años de edad a quien en los próximos días se le colocará una prótesis ocular.
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