México, D.F. / Ene. 24
En la agenda de los primeros 100 días de gestión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, debe incluirse un programa de trabajo temporal para los migrantes, en coordinación con el gobierno mexicano, ante la imposibilidad de que a corto plazo se pueda concretar un acuerdo migratorio, consideró Carlos Villanueva, presidente de la Asociación Mundial de Mexicanos en el Exterior.
El propósito, explicó el representante de la asociación —que aglutina a 788 organizaciones de connacionales en Estados Unidos—, es aminorar los efectos de la crisis económica y de las redadas que se han incrementado contra esta comunidad.
En entrevista con EL UNIVERSAL, indicó que Obama tiene un compromiso con la comunidad hispana, de quien recibió más de 60% de los votos que lo llevaron al poder, por lo que mejorar sus condiciones de vida también debe incluirse en su lista de acciones prioritarias.
El activista señaló que pensar en estos momentos en un acuerdo migratorio “es aspirar a mucho”, pues en Estados Unidos hay grupos radicalizados en este tema, ya que ante la crisis defienden los pocos empleos que hay para que éstos no sean ocupados por indocumentados.
La opción para Villanueva es que en los próximos tres meses México tenga la capacidad de negociar con la administración de Obama un programa de trabajo temporal, pues el gobierno de Calderón este año tampoco podrá atender la demanda de empleos que implica el retorno de mexicanos ante la crisis.
En Estados Unidos, señaló, los indocumentados enfrentan una situación crítica, pues además de los problemas económicos en ese país, las políticas antimigrantes se han recrudecido, al intensificarse las redadas en California, Illinois, Nevada y Nueva York.
Los operativos, aseguró, “han seguido la misma ruta que los migrantes mexicanos, y en los últimos meses se han extendido a casi una veintena de estados que incluyen Carolina del Norte y Carolina del Sur, Atlanta y Arizona”.
De acuerdo con datos de la Asociación que preside Villanueva, entre enero y octubre de 2008 alrededor de 725 mil personas han sido deportadas como resultado de las redadas, sin que a ninguna de estas personas se les haya permitido comparecer ante autoridades migratorias “para impedir que abandonen en Estados Unidos a su familia”.
Las cifras contrastan con las que en diciembre pasado dio a conocer Carlos Rico Ferrat, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quien aseguró que han disminuido las redadas en Estados Unidos, ya que de
90 operativos en 2007 en los que se detuvo a 4 mil 40 mexicanos, durante 2008 la cifra llegó a 60 operativos donde aprehendieron a mil 400 paisanos.
Villanueva aseguró que desde su punto de vista “el subsecretario (Carlos Rico) está mal informado, ya que las redadas se dan casi todos los días y cientos de personas son deportadas de inmediato”.
Dijo que, en todo caso, las cifras oficiales reflejan que las acciones de protección consular de la Secretaría de Relaciones Exteriores en los Estados Unidos no están funcionando, pues las autoridades no están informadas de lo que ocurre a los mexicanos indocumentados en ese país.
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