Santo Domingo, República Dominicana.-
Con un entorno estremecido por el mortal atentado terrorista ocurrido en la madrugada del domingo en una discoteca gay en Orlando, Florida, los conflictos entre bandos de pro y anti aborto y derechos de lesbianas, homosexuales, transexuales y bisexuales (LGTB) agitaron las horas previas al inicio, la noche de este lunes, de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) en República Dominicana.
Católicos y evangélicos dominicanos y del exterior marcharon el domingo en contra de que la Asamblea, que finalizará el miércoles, adopte políticas a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo o del aborto como parte de los debates sobre el “Fortalecimiento Institucional para el Desarrollo Sostenible en las Américas”, su tema central. Un grupo pro LGTB se manifestó ayer lunes en la mañana frente a la sede de la Asamblea para exigir una convención interamericana de derechos sexuales y reproductivos.
Un lío estalló al atardecer del domingo en un baño de mujeres de un hotel de esta capital en el que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, mantenía conversaciones con delegados de la sociedad civil hemisférica sobre derechos humanos, y derivó en un pleito a empellones e intercambio de insultos entre grupos pro y anti LGTB.
La pugna surgió cuando a un grupo de mujeres transgénero que acudió a ese diálogo se le intentó negar el ingreso a un servicio sanitario para féminas, lo que reprodujo casos similares registrados en Estados Unidos y reconfirmó la advertencia hecha por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, adscrita a la OEA, en un estudio en 2015 acerca de que en América hay discriminación y violencia contra la comunidad LGBT.
Almagro escribió el domingo en Twitter, tras los hechos en Florida, que los “crímenes de odio” contra esa comunidad “deben ser desterrados. No podemos permitir ninguna forma de discriminación”.