Comercios de McAllen y Mission Texas, lucen vacíos, en los puentes internacionales se denota una desolación.
McAllen, Tx.-
Las tiendas departamentales y de tecnología ubicadas en McAllen y Mission Texas “sufren” al lucir vacías, a pesar de ser principio de mes.
No obstante, los empleados confían que para el fin de semana haya un repunte en las ventas cuando se espera lleguen los regios aprovechando el “puente” del 5 de febrero.
Desde los puentes internacionales se denota una desolación en las ciudades fronterizas como Hidalgo y Mission, la fila en el puente internacional Anzaldúas para internarse en los Estados Unidos era de tan solo 10 minutos.
Mientras que en el puente internacional Reynosa-Hidalgo, la espera no se prolongaba por más de una hora, sin embargo en ese cruce la mayoría de los automóviles lucían placas texanas.
En Simon La Plaza Mall de McAllen los cajones del estacionamiento no estaban a su máxima capacidad, la misma situación se apreciaba dentro de la instalación y en los pisos o puntos de venta.
En Dillard´s y JC Penney los empleados refirieron que las ventas han estado un poco flojas desde el pasado fin de semana, consideran que el desplome se debe a las campañas de redes sociales que hay en México en donde se exhorta a la comunidad a no asistir a los centros comerciales de la Unión Americana.
Después de las 18:00 horas el flujo se incrementó en los centros comerciales, aunque no de manera considerable, no obstante, la mayoría de los clientes son residentes de esas ciudades que salen a despejarse después del trabajo, aclararon los vendedores de piso de los Mall´s.
Al solicitar información en la Cámara de Comercio de McAllen para saber con precisión el comportamiento de las empresas y la productividad que se genera desde hace dos semanas, no recibimos respuesta.
Líderes empresariales de Reynosa, añaden que aunado a las campañas de redes sociales en protesta contra el racismo del presidente Donald Trump contra los mexicanos, la paridad del dólar contra el peso es otro factor para que la gente viaje menos al lado americano.
Aunque precisan que el poder adquisitivo de los ciudadanos americanos debiera ser un factor para que los negocios de Reynosa y otras regiones de la frontera norte de México se beneficien, tampoco las ventas en esas zonas han despuntado.