Milán, Italia.-
Después de empatar 1-1 en lo 90 minutos reglamentarios, Real Madrid y Atlético de Madrid se fueron a tiempos extras para definir qué equipo levantará la codiciada “orejona”, en la final de la Champions League.
Un servicio a balón parado que definió el defensa español Sergio Ramos al minuto 14 le permitió a Real Madrid soñar con repetir la historia elaborada en la final de Champions League de Lisboa 2014, adelantándose en el marcador 1-0.
Sin embargo cuando el partido comenzaba a agonizar una jugada con base a pura fuerza por parte de los “colchoneros” permitió el empate 1-1 con anotación del centrocampista belga Yannick Carrasco, quien mandó la definición del nuevo monarca a los tiempos extra.
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