En conferencia de prensa realizada este jueves 17 de febrero en las oficinas del equipo, Víctor Ordóñez informó que la franquicia de los Tecolotes de Nuevo Laredo ha sido puesta a la venta al mejor postor y con ello reafirma que ya no harán más esfuerzos por mantenerla en esa ciudad fronteriza.
El agente aduanal considera que los derechos del club valen entre 2 y 2.5 millones de dólares y que a partir de hoy escucharán ofertas de quien desee comprar el equipo.
Este histórico club (en Nuevo Laredo se jugó por primera vez con luz artificial en México) se fue de la ciudad en 2003 con rumbo a Aguascalientes y luego regresó a la Liga Mexicana de Beisbol apenas en 2008, cuando compraron los derechos de los mismos Rieleros. Para ello recibieron un nuevo parque de pelota construido por el municipio.
“Estamos navegando en contra de la corriente, hay un pasivo del 2009 que tenemos que cubrir”, dijo antes de empezar la temporada 2010 el presidente del Consejo de Administración de los Tecolotes.
Pero las cosas no fueron mejores el año pasado y el equipo terminó en el fondo, deportiva y económicamente hablando.
Debido a los problemas de dinero, Tecolotes y Dorados de Chihuahua solicitaron permiso para ausentarse una temporada (2011) del circuito profesional, pero mantuvieron su roster de peloteros, mismos que fueron sorteados entre el resto de los equipos.
La idea es que para 2012 esos clubes regresen en sus mismas plazas o en otras que quieran hacerse cargo de la difícil encomienda.
La semana pasada los directivos de Tecolotes acudieron a la junta de presidentes en la Ciudad de México donde pidieron permiso para poner a la venta el equipo, mismo que les fue concedido.
Se dice que ciudades como León, Guanajuato, Guadalajara, Jalisco, Aguascalientes y Tuxtla Gutiérrez, Chiapas tienen interés en tener beisbol profesional el próximo año.
GRAN HISTORIA
Los Tecolotes de Nuevo Laredo fueron el equipo grande los años 50, ganando campeonatos en 1953, 54 y 58. Luego volvieron a tener una época de oro en los ochenta, cuando formaron una dinastía encabezada por Alejandro Ortiz, Carlos Soto y Andrés Mora, entre otros.
El manager José Héctor “Zacatillo” Guerrero fue fundamental para escribir esa segunda etapa al dirigir con atingencia un grupo de peloteros que hicieron historia en la frontera.
Los títulos regresaron en 1977 y 1989, pero en 1985 se convirtieron en el único equipo profesional en jugar en dos países durante la misma temporada y de manera regular. De sus series de tres partidos uno lo realizaban en Laredo, Texas.
Es una lástima que una tradición tan grande se pierda, pero los tiempos han cambiado y este último intento por tener beisbol profesional en la frontera ha fracasado.
Ojalá no pase lo mismo en Reynosa.
hbencomo@hotmail.com
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