El día de Navidad, se acerca aceleradamente, en ese espacio que llamamos tiempo, esta fecha es de recapitulación, de crear esperanzas, de valorar logros y, sobre todo, pensar que el próximo año, nos vaya mejor que en este, que está por terminar; en lo que a mi persona respecta, desde estas aisladas notas, les deseo, que todos sus anhelos se realicen, que sus sueños se concreten y que vean en el próximo año, el futuro que tanto desean.
No es fácil en estos tiempos, diría mejor, nunca ha sido fácil alcanzar metas, pero si no hay propósito, menos habrá metas y en ello los mexicanos adolecemos, de muchas fallas, el ancestral, ahí se va, juega con nuestra conciencia, con nuestros propósitos, si no lo abolimos, seguiremos en el marasmo. En que los políticos, nos tienen inmersos, tal parece que ese es el camino, medios comidos, medios dormidos, medios despiertos, para que no tengamos ni capacidad , ni fuerza para luchar contra ellos, hasta ahora, en la larga vida que llevo, son contados los políticos que han querido a México, se quieren ellos, su comodidad y sus familias, pero el pueblo, bueno, es pueblo… que se joda.
Recién había llegado a Reynosa, allá por el año 1962, era un villorrio, mis padres, me cuestionaban, mi deso de permanecer en Reynosa, yo les respondía que era una ciudad en crecimiento, que le veía futuro y, sobre todo, a diferencia de Monterrey, Guadalajara y el DF, era muy tranquilo, quienes vivíamos a ambos lados de las fronteras, nos conocíamos y utilizábamos el gentilicio de “primo” pues la familiaridad, era absoluta, esto pasó, Reynosa es ahora peligrosa, no porque los ciudadanos pacíficos quieran, sino porque negociantes, de otra Índole, han distorsionado el vecindario, no logro entender, todo en esta vida, todo, tiene arreglo, me pregunto ¿A quién le habrá faltado, capacidad para lograrlo? El negocio referido existe en todo el mundo ¿por qué sólo aquí, oímos zumbar las balas?
A pesar de todo, y contra todos los •nimos, como dije al principio, a los buenos y a los malos, a los polÌticos, les deseo, una feliz Navidad y un mejor 2010, que dios o el destino, como quieran llamarle, les ilumine, para que encuentren el mejor camino, asÌ, obtener una paz, que la ciudad grita por ella; para que el trabajo regrese y con ella la seguridad deseada por los ciudadanos, Nuevamente, Felicidades y Prosperidad a todos.
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