Un vetusto microbús de los que cobran nueve pesos por pasaje, fue enviado por el diputado local JUAN BÁEZ RODRÍGUEZ para acarrear a victorenses a su informe en Jaumave.
El microbús iba con invitados a escuchar al legislador más activo de la región, al menos eso es lo que presumió durante su comparecencia en el que dio cuenta de las gestiones que hizo ante las autoridades para llevar beneficios a la ciudadanía.
El relato fue tan fantástico que ninguno de sus invitados se quedó dormido, todos aplaudieron a rabiar, principalmente lo que fueron llevados en el vetusto microbús, que recibieron una dulce promesa.
Los invitados de las colonias albergaron la calurosa oferta de que la fila que más aplaudiera obtendría una hermosa despensa con aceite, un kilo de harina de maíz, frijol y papel higiénico.
La realidad fue muy diferente, la promesa de una despensa que calmara el hambre por lo menos unos días, simplemente nunca llegó.
Tampoco los 200 pesos que prometieron por llevar aplausos al informe del diputado.
Decepcionados y tristes, los victorenses subieron otra vez al microbús para abandonar Jaumave en medio del desaliento total.
La unidad inicio el regreso por la carretera , otra vez repleta de más de una veintena de victorenses tristes, decepcionados y casi llorando por la decepción. Otra vez los defraudaron.
Sin embargo, lo peor estaba por ocurrir en el tramo de la carretera Rumbo Nuevo, cuando el vetusto autobús que fue rentado por el diputado JUAN BÁEZ RODRÍGUEZ, se quedó sin frenos en medio de la carretera.
En medio de la unidad se escuchaban los gritos de terror, mientras los tripulantes se acordaban de orar y pedir que el chofer controlara la unidad.
El olor a balatas y llantas quemadas inundó todo el interior de la unidad, mientras la gente iba y venía en su interior golpeándose unos con otros y los gritos para el conductor exigiendo que abriera las puertas para lanzarse antes de que el microbús cayera al vacío o chocará con el talud de la sierra.
Finalmente la pericia del chofer logró controlar la unidad al aplicar el freno de motor, la unidad quedo en medio de la carretera.
Los pasajeros bajaron aliviados, finalmente salvaron la vida, la misma que expusieron pensando en una despensa y los 200 pesos que nunca recibieron por asistir al informe del diputado local JUAN BÁEZ RODRÍGUEZ.
La Subsecretaria de Educación, LUCÍA AIME CASTILLO PASTOR paso por el lugar y reportó el percance y se paró para auxiliar y dar raid a las mujeres que todavía lloraban por el enorme susto que recibieron.
Ellas las mujeres que viven esperanzadas en recibir apoyos federales a través de la incubadora de negocios llamada “Aquí y ahora” que manejan JUAN BÁEZ y el exdiputado federal, TOMÁS GLORIA REQUENA.
Es una incubadora de negocios fraudulenta, igual que el viajecito a Jaumave, donde los beneficiarios son engañados para entregar papelería, firmar proyectos y nombrar a un par de sinvergüenzas como sus representantes.
Los recursos federales que obtienen de diversas dependencias son millonarios, es un negocio redondo, pues cobran por cada proyecto cinco mil pesos, pero los beneficiarios nunca reciben los recursos.
GLORIA sabe cómo justificar los recursos y que ventanillas obtener. Las ganancias sólo durante el 2015 alcanzó los 6 millones de pesos.
En el escritorio de FLORENTINO AARÓN SÁENZ COBOS, el líder de la CNC hay muchas denuncias por el fraude que cometen en contra de sus hermanos, los campesinos.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…